Deprecated: The behavior of unparenthesized expressions containing both '.' and '+'/'-' will change in PHP 8: '+'/'-' will take a higher precedence in /home/benscijc/public_html/wp-content/plugins/newsletter/includes/module-base.php on line 1222
Cocaína adulterada, el asco de lo sintético de lo sintético. - Blow

Cocaína adulterada, el asco de lo sintético de lo sintético.

No es que exista la cocaína orgánica, vegana, gluten free y libre de maltrato animal… pero tampoco es que te vayas a meter la primera porquería que te quieran vender solo porque eres un tremendo ignorante y consumidor crónico. Cuando sepas que se utilizan tranquilizantes para elefantes y medicinas para tratar los gusanos y parásitos en los perros para adulterar la cocaína que estás por meterte, quizá quieras pensarlo dos veces.

Blow_Sept_Cocaine_Post-min teen-girl-bullied-through-social-media-min-compressed (1) teen-girl-bullied-through-social-media-min-compressed teen-girl-bullied-through-social-media-min human-skull-and-crossbones-drug-addict-concept-min-compressed human-skull-and-crossbones-drug-addict-concept-min

La coca adulterada es mortal.

A principios de este año circularon historias sobre la muerte de varios consumidores de drogas que habían ingerido cocaína adulterada en Buenos Aires, la capital de Argentina. Al menos 20 personas murieron tras no soportar los efectos de consumir esta droga basura.

Además, decenas más de consumidores fueron hospitalizados de gravedad tras los efectos devastadores de esta cocaína de mala calidad. Más de diez personas fueron detenidas en Puerta 8, una “villa miseria” en la Zona Oeste del conurbano de Buenos Aires, de donde se presume que salió esta cocaína adulterada.

Casi todos los afectados eran hombres de entre 30 y 40 años, y la mitad de los fallecidos ni siquiera alcanzó a llegar al hospital. Este caso revela varias aristas, desde el conflicto entre bandas del narcotráfico y su necesidad de acaparar más mercado, hasta el contexto de marginación, pobreza y crisis que está afectando a buena parte de los países latinoamericanos.

Mientras se discuten las políticas de drogas, miles de jóvenes están en las calles buscando su próxima dosis, y tal vez la mayoría de ellos solo quieren algo barato, rápido y que les pegue bien, sin cuestionar la calidad del producto.

¿Con qué se adultera la cocaína?

Los especialistas que atendieron el caso argentino determinaron que se utilizó el carfentanilo para adulterar la cocaína que consumieron las personas que murieron y las que resultaron hospitalizadas. En realidad, el carfentanilo se trata de un opiáceo empleado por veterinarios para tranquilizar a animales grandes como elefantes o rinocerontes.

El carfentanilo es derivado del fentanilo, con la diferencia que es muy letal y tóxico para los humanos, ya que es de uso veterinario y de venta controlada en Estados Unidos, no así en países de América Latina, donde es utilizado para cortar drogas sintéticas y hacerlas rendir para obtener mayores ingresos por su venta.

Para adulterar la cocaína también se ha detectado el uso de levamisol, un medicamento veterinario que actúa contra gusanos y parásitos. Al menos desde 2003 se ha documentado el uso de este antihelmíntico en Estados Unidos, y en los siguientes años bajó a países como Uruguay y Argentina, que de hecho son los tres principales países consumidores de cocaína en el continente americano.

Similar a los efectos y a los usos que se le ha dado a la xilazina para cortar la heroína, la morfina y usando fentanilo, el carfentanilo ha comenzado a posicionarse como agente para redituar en mayores beneficios a los fabricantes de drogas en laboratorios clandestinos, y que llegan con facilidad a las calles, sobre todo a consumidores adictos y poco informados que no repararán en seguir en el rush a pesar de estar metiéndose una droga que es pura basura.

Un consumidor consciente sabe que la cocaína es adictiva y peligrosa, por eso preferirá acudir a fuentes que le garanticen un buen producto para gozar mejor de sus efectos. Un consumidor adicto y sin criterio se meterá lo que sea que le recuerde a la sensación que ya experimentó, poniendo por delante su premura que el disfrute de un efecto placentero.

Efectos de la cocaína adulterada.

El mareo se manifiesta casi inmediatamente, acompañado de una sensación de desmayo, muy cercano a experimentar una “pálida”. A estos síntomas se puede agregar algún ataque de pánico y la sudoración fría, así como las ganas de vomitar, pero sin poder lograrlo.

Dependiendo de qué tan cargada esté tu dosis, es probable que te cueste trabajo respirar y los vómitos se manifiesten en la siguiente hora, propulsados por un temblor incontrolable en las extremidades.

Lo anterior se refiere al consumo inmediato de una cocaína que ha sido claramente adulterada y que puede conducir a una muerte casi inmediata; pero los efectos por un consumo prolongado se acentúan de acuerdo con la frecuencia de uso y van deteriorando la calidad de vida del consumidor.

Efectos como la neutropenia, que es el bajo conteo de glóbulos blancos y que nos hacen más propensos a infecciones; la inflamación de la materia blanca del cerebro; las hemorragias pulmonares; la inflamación de los vasos sanguíneos que puede restringir el flujo de sangre hacia los órganos y los tejidos, son solo parte del cuadro de horror que puedes contraer de seguir insistiendo en meterte rayas de pésima calidad.

Un debate sin fin.

El debate siempre seguirá entre regular el mercado de drogas para sacarlo de la ilegalidad y se deje de criminalizar a los consumidores; o bien, dejar las cosas como están, endurecer las leyes antidrogas y seguir permitiendo que lleguen productos basura a inundar el mercado negro.

La cuestión cambia de perspectivas y de individuos involucrados. Los trabajadores que gustan de meterse unas líneas de vez en cuando alegarán su derecho a seguir consumiendo, exigiendo un acceso a sus derechos de salud y de libertad de consumo porque pagan impuestos y no están afectando a terceros con su consumo responsable.

Para muchos otros la cuestión nunca cambiará y la vía siempre será la estigmatización de los consumidores y adictos, y el exigir penas más severas para el tráfico, la posesión y el consumo de sustancias ilícitas. Pero también en este bando estarían pasando por alto el derecho de las libertades de los demás.

Quizá lo que debería estar por delante sea el derecho a la vida, el garantizar la mayor cantidad de opciones para que tanto como consumidores y personas con problemas de adicción tengan tratamientos adecuados, y que quienes no consuman conozcan los efectos de las sustancias y la importancia que tiene el terminar con el mercado ilegal, que amenaza principalmente a las zonas marginadas.

¿Te gusta lo que ves? ¡Compártelo!